LOS INCAPACES Y LOS INDIGNOS

BUENA TIERRA (PARTE3)

LOS INCAPACES Y LOS INDIGNOS 

Autor: Freddy Humberto Trino Camacho

Dios de hecho conoce, nuestras capacidades, habilidades, destrezas, potencialidades, para colocarnos en el lugar correcto para que lo podamos servir. (¡Yo, Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras! Jeremías 17:10). El nos conoció así antes de nacer. (A ti fui encomendado desde antes de nacer; desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios. Salmos 22:10). Y el nos encomendó una tarea en esta tierra. «Antes que te formara en el vientre, te conocí, y antes que nacieras, te santifiqué, te di por profeta a las naciones». Jeremías 1:5

Dios persevera en su confianza y los elegidos deben guardarse en completa paz (Tú guardaras en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti a confiado. Isaías 26:3). Jonás se sintió incapaz ante esa confianza y entró temor a su corazón, quiere decir que se quedo corto y huyo como un cobarde, ante la misión encomendada. (Pero Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, donde encontró una nave que partía para Tarsis; pagó su pasaje, y se embarcó para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová. Jonás 1:3). Para Dios no hay excusas y su reprensión es irrefutable. (Pero Jehová hizo soplar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad tan grande que se pensó que se partiría la nave. Jonás 1:4)

Elegidos como Isaías, llamado al altar de Dios, pueden sentirse indignos pero no incapaces por alguna debilidad espiritual, pero Dios purifica eso indigno con la unción. (Entonces dije:- «¡Ay de mi soy muerto!, porque siendo hombre inmundo de labios y hablando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos».-Y voló hacia mi uno de los serafines, trayendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas. Tocando con él sobre mi boca, dijo:-He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa y limpio tu pecado. Isaías 6:5-6-7). Entonces así Dios llamó en confianza e Isaías y este respondió asertivamente. (Después oí la voz del Señor, que decía:-¿A quién enviaré y quien irá por nosotros? Entonces respondí yo: -Heme aquí, envíame a mí. Isaías 6:8).

Y todos los que fueron llamados a su propósito y aceptaron el mandato de Dios, todas las cosas lo ayudan bien y estos son justificados y glorificados.( Sabemos, además, que los que aman a Dios, todas las cosas los ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. A los que antes conoció, también los predestino para que fueran hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó. Romanos 8:28-29-30)

Mientras aquellos que endurecieron su corazón, no hallaran reposo del Señor, esto quiere decir paz.(Por eso, como dice el Espíritu Santo: «Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones como en la provocación, en el día de lamentación en el desierto, donde me tentaron vuestros padres; me pusieron a prueba y vieron mis obras cuarenta años. Por eso me disgusté contra aquella generación y dije: “Siempre andan vagando en su corazón y no han conocido mis caminos”. Por tanto, juré en mi ira: “No entraran en mi reposo”» Hebreos 3:7-8-9-10-11)

Juntamente con la unción viene por la gracia del Señor el don que esta en relación al ministerio, en el lugar y momento precisos. (Tenemos, pues, diferentes dones, según la gracia que nos es dada: el que tiene don de profecía, úselo conforme a la medida de la fe; el de servicio, en servir; el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con generosidad; el que preside con solicitud; el que hace misericordia, con alegría. Romanos 12:6-7-8)( Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.)

Cuando la unción y el don son de Dios, gente que no nos conocieron ni nos conocen, correrán a nosotros por causa de Él. (He aquí, llamaras a gente que no conociste y gentes que no te conocieron correrán a ti por causa de Jehová, tu Dios y del Santo de Israel, que te ha honrado. Isaías 55:5)

MENSAJERO- PROFETA